Al estar elaboradas a partir de las células madre del propio paciente las córneas de hidrogel son compatibles y se evita de esta forma posibles rechazos por parte del sistema inmunitario.
Imaginemos a una paciente cualquiera: la señora Hernández. Tiene 60 años y padece queratopatía bullosa: quistes en las córneas. En caso de no tratarse, lo más probable es que, tarde o temprano, pierda la visión. Así que para evitar llegar a este extremo se somete a un trasplante de córneas. Sin embargo, su visión no mejora y es necesario una nueva intervención y, sobre todo, esperar otra donación.
En la actualidad, al igual que esta paciente ficticia, son millones las personas que esperan su trasplante de córnea. La donación de esta parte del ojo que cubre el iris es escasa, y algo que también debemos tener en cuenta es que la córnea tiende a degenerarse con los años. De ahí, que la ceguera esté muchas veces relacionada con esta estructura prodigiosa que alberga el mayor número de terminaciones nerviosas de todo nuestro cuerpo.
Los científicos buscan desde hace tiempo una alternativa. Un modo de disponer de córneas sin tener que esperar donaciones y que a su vez, no ocasionen rechazo al cuerpo humano. ¿La solución? Estas córneas de hidrogel desarrolladas por el biomédico Berkay Ozcelik de la Universidad de Melbourne (Australia).
Analicemos, en primer lugar, qué funciones tienen nuestras córneas para comprender el impacto de este maravilloso hallazgo. Para empezar, la córnea es la capa externa del ojo que lo protege de los gérmenes, el polvo y otros elementos que pueden entrar en él e irritarlo. Pero, además, tiene otras funciones:
Sabemos que, a la hora de hablar de la donación de órganos, pensamos casi de inmediato en órganos tan vitales como el corazón, hígado, riñones… Ahora bien, algo que no todo el mundo sabe es que las córneas pueden devolver la vista a las personas que la han perdido. Es algo maravilloso.
Así pues, disponer con un avance en este campo supone algo, sin duda, excepcional. Ya no tendríamos que esperar a que una persona falleciera para recibir su donación, para tener esas córneas con las cuales tratar a ese paciente que, tal vez, es el segundo trasplante que recibe.
Las córneas de hidrogel serían compatibles para cada persona porque se elaborarían a partir de sus células madre, de ese modo, evitaríamos rechazos. Ahora bien… ¿de qué manera se produce este hecho tan asombroso?
El objetivo de este avance es conseguir que esta córnea sea permanente, que no cause rechazo y que el sistema inmunitario no la vea como un «cuerpo extraño». Para elaborar estas córneas se sigue el siguiente proceso:
De momento todas las pruebas se han realizado en laboratorio con una tasa de éxito notable. Son muchos los medios que hablan ya de una cura eficaz para muchos tipos de ceguera. No obstante, su responsable, Berkay Ozcelik, quiere ser prudente.
Esto sería un modo de obtener esta parte tan imprescindible del ojo sin necesidad de donantes. Estaremos pues pendientes de los resultados en pacientes humanos, esperando que sean positivos. Sin duda, es un gran avance que aporta mucha esperanza.
Licenciada en Psicología por la Universidad de Valencia en el año 2004. Máster en Seguridad y Salud en el trabajo en 2005 y Máster en Mental System Management: neurocreatividad, innovación y sexto sentido en el 2016 (Universidad de Valencia). Número de colegiada CV14913. Realizó el curso Nutrición y obesidad: control de sobrepeso, ofrecido por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Estudiante de Antropología Social y Cultural por la UNED.
Valeria Sabater ha trabajado en el área de la psicología social seleccionando y formando personal. A partir del 2008 ejerce como formadora de psicología e inteligencia emocional en centros de secundaria y ofrece apoyo psicopedagógico a niños con problemas del desarrollo y aprendizaje. Además, es escritora y cuenta con diversos premios literarios.