SÍNDROME POST VACACIONAL

El síndrome postvacacional, es definido por los especialistas como el estado que se produce en un trabajador cuando fracasa la adaptación entre las vacaciones y la vuelta a la actividad cotidiana. Esta readaptación luego de un período de descanso genera en algunas personas una reacción de stress. Asimismo, el tener que volver a enfrentarse con las responsabilidades y las obligaciones puede generar un aumento de ansiedad.

Lógicamente, esto provoca molestias que hacen responder a nuestras actividades rutinarias con un menor rendimiento. Quienes padecen este síndrome sufren cambios que generan un malestar importante con una repercusión sobre su calidad de vida.

Su presencia es más frecuente sobre todo en los meses de Diciembre a Marzo, cuando la mayoría de los empleados decide gozar su periodo vacacional.

Algunos de los síntomas que se manifiestan abarcan desde aspectos psicológicos como preocupación, malestar, inseguridad, irritabilidad, nerviosismo, falta de interés, tristeza, hasta indicios físicos como cansancio generalizado, falta de sueño, fatiga, palpitaciones, taquicardia, dolores de cabeza, malestar digestivo, dolores musculares, entre otros.

En casos mas severos puede aparecer una sensación de angustia vital generadora de un bloqueo en el cual la persona es incapaz de tomar cualquier tipo de decisión.

La mayoría de las personas suelen expresar su deseo de “vivir de vacaciones”, pero lo más saludable suele ser poder reconocer aspectos agradables a la vuelta de un descanso, como por ejemplo, las relaciones sociales con los compañeros, señalan los expertos, pueden reducir los niveles de stress y hacer más llevadero el proceso de adaptación.

Consejos para superar el estrés postvacacional

• Programar el regreso con tiempo. Los especialistas aconsejan que no se debería regresar de las vacaciones el día anterior a la vuelta al trabajo. En cambio, se pueden tomar unos días desde el regreso hasta el inicio de la jornada laboral.

• Comenzar la rutina poco a poco, analizando las tareas y estableciendo orden de importancia.

• Respetar el momento de almuerzo como descanso, evitando pasarlo por alto.

• Dejar el trabajo en la oficina, y no llevarlo a la casa.

• Descansar lo suficiente, durmiendo 8 horas. Regularizar el ritmo de sueño que quizás se haya alterado en las vacaciones.

• Desconectarse de las preocupaciones. Salir con amigos y retomar actividades personales de esparcimiento.

• Practicar deportes, pues libera endorfinas y ayuda a la relajación. Además libera la mente del stress, al concentrarnos en la ejecución del ejercicio físico.

• Evitar pensamientos recurrentes, que dan vueltas en la cabeza constantemente. Ello aumenta la ansiedad y la sensación de falta de control.

• Aprender a decir “no”. Poner límites hace que se pueda tener el control de la situación, y manejar la carga de trabajo acumulado luego de las vacaciones.

• Tener paciencia. El Síndrome Post Vacacional es pasajero. Al poder sobrellevar la rutina diaria, los síntomas desaparecen.

Algunos números:

• En Argentina, cerca de un 15% de los empleados experimentan alteraciones al retomar el trabajo luego de las vacaciones y el principal grupo de riesgo son las personas jóvenes con mucha exigencia laboral.

• La población más expuesta son los trabajadores entre 25 y 40 años.

• Las mujeres son las que más lo sufren, ya que afecta al 63% de ellas.