Quienes se formen en comercio exterior, tienen por delante un futuro de trabajo asegurado. Siempre y cuando estén dispuestos a ser realmente innovadores y protagonistas.
El mundo actual demanda una actualización permanente para afrontar sus cambios constantes. Por esta razón, hoy se debe poner énfasis en carreras cortas, en pasantías de trabajos; en viajes de desarrollo profesional, en el estudio de mercados externos y sus ambientes culturales; en el aprendizaje de idiomas; en el manejo de las tecnologías de información; en conocer los complejos circuitos de la comercialización a nivel internacional e interno de los otros países y regiones; en conocer los secretos de la logística y de la distribución física de bienes; en saber incorporar valor intelectual a lo que nuestro país puede producir, por ejemplo, la importancia de la calidad sanitaria, del diseño y de la presentación de aquello que queremos exportar.
La Fundación ICBC, con más de 40 años de trayectoria y líder en la enseñanza de temas relacionados con el comercio internacional, brinda a sus alumnos las herramientas necesarias y la capacidad estratégica para anticipar el futuro en la competencia por los mercados mundiales.
Tan solo 3 años de cursada para descubrir un mundo de oportunidades de la mano de especialistas.
La Fundación ICBC creó en 1987 la Escuela de Comercio Exterior (ECE). Con un previo curso de ingreso y con tres años de cursada los alumnos obtienen un título terciario reconocido a nivel nacional con una amplia inserción laboral.
La Escuela apunta a formar profesionales con capacitación integral para desempeñarse eficazmente tanto en empresas privadas, públicas o como profesional independiente. Su plan de estudios brinda un fundamento teórico-práctico que permite desplegar una vocación de negocios en general y de comercio exterior en particular, con una inmediata inserción laboral.
Este programa contempla una formación humana simultánea a su capacitación técnica y operatoria.